EsSalud: problemas conductuales en niños pueden ser los primeros signos de autismo o trastorno en déficit de atención

En lo que va del 2023, el hospital Guillermo Almenara de EsSalud ha recibido niños con problemas conductuales, el 50% de ellos fue diagnosticado con autismo y el 30%, con déficit de atención; sin que sus padres tengan alguna sospecha.

Publicado el 06/11/2023 a las 12:46

Muchos padres llegan a la consulta externa con sus niños por problemas conductuales, es decir, porque no suelen hacer caso a sus indicaciones o son muy distraídos; sin embargo, al término de las evaluaciones médicas y emitido el diagnóstico, se han dado cuenta de que estaban frente ante un hijo con trastorno de espectro autista o déficit de atención, no diagnosticados.

“Del total de consultas derivadas por problemas de conducto o socialización, el 50% de niños es diagnosticado con problemas de trastorno del espectro autista (TEA) y el 30% de ellos, presentan problemas de déficit de atención (TDA), condiciones que afectan su escolaridad y socialización”, explica el Dr. Hugo Becerra Livia, jefe de Patología del Desarrollo del Hospital Almenara de EsSalud.

El hospital Almenara de EsSalud tiene profesionales capacitados en la evaluación, diagnóstico y tratamiento. El Servicio de Patología del Desarrollo brinda terapias de lenguaje para desarrollar habilidades de comunicación y estimular el habla; terapia ocupacional para mejorar la atención, el juego y la estimulación sensorial y terapia de aprendizaje la cual contribuye a mejorar las habilidades de lectoescritura, cálculo y pautas de estudio en los niños con este espectro.

“Después de la pandemia hemos visto que muchos niños han comenzado a sufrir diferentes problemas de comunicación, aparentemente, debido a la poca socialización durante estos dos o tres años de aislamiento, esto los ha retrasado a nivel social y educativo”, detalla el especialista de EsSalud.

Por eso, EsSalud exhorta a los padres de familia a permanecer atentos a los primeros signos de autismo o déficit de atención, no tratar a los niños como desobedientes o como un caso de mala crianza. Se debe tener en cuenta, por ejemplo: si el niño nos mira a los ojos, si interactúa con nosotros, si es muy sensible a algunos sonidos fuertes, si les incomoda algunas texturas como las etiquetas de la ropa, si no le gusta ensuciarse las manos, etc. la detección temprana está en manos de todos.